Pasemos revista, pues, a los argumentos que he compilado durante las interminables discusiones que otras personas y yo tuvimos sobre este tema. Primera objeción: Libertad negativa y positiva...
Los niños crecieron. Esaú llegó a ser un hombre del campo y muy buen cazador; Jacob, por el contrario, era un hombre tranquilo, y le agradaba quedarse en el campamento. Isaac quería más a Esaú, porque le gustaba comer de lo que él cazaba...