A ESOS PICOS DE ORO ENCORBATADOS Y TRAJEADOS A vosotros que, apoltronados, en los magnificos sillones de vuestros lujosos despachos desde donde gobernáis el mundo jugando un siniestro ajedrez sobre el tablero del Mapa - Mundi...
Ella puso toda la ropa en la maleta e hizó un hueco para poner la rama de olivo que siempre llevaba en su pico. La paloma dio un repaso a su equipaje y añadió el bañador, la toalla, el bronceador y las chanclas...