Al iniciar esta descripción de mis primeros contactos con la lectura escrita, no tenía claro de qué forma hacerlo...
Transcurrían los primeros años de la década de los ochenta, siendo un niño de unos seis o siete años, para ese entonces vivía con mi familia en la capital de la montaña , era mi padre un ejecutivo de una empresa de seguros...
Estas fueron las palabras de mi abuelo cuando un día al llegar de su trabajo me sentó en sus piernas y saco un regalo que tenia para mi, estaba envuelto en un papel dorado que hacía mucho ruido mientras lo abría...